Juguetes rotos (I): Robbie Williams

Todo el mundo sabe quién es este cantante. Británico con siete álbumes que vendieron millones y millones de unidades en todo el mundo. Sus giras fueron exitosas llenando estadios de más de 50 mil espectadores. Pero desde hace casi 2 años no se sabe nada de él.

Su último disco es "Rudebox", publicado en Octubre de 2006. No vendió tanto como los anteriores -es bastante mediocre- pero a muchos otros artistas ya les gustaría vender los 4 millones que vendió. Robbie Williams hizo una mini gira para presentar el disco, finalizando el 18 de Diciembre de ese mismo año. Desde entonces, desapareció de la vida pública. Se negó a hacer una gran gira mundial durante 2007 y dejó de hablarse con Guy Chambers, la persona que le ha compuesto todas y cada una de las canciones de sus discos -Robbie Williams no sabe componer-. Además, el disco "Rudebox" era el último del contrato que tenía con la discográfica EMI. Desde entonces, la Navidad de 2006, Robbie Williams se fue a vivir a su mansión californiana de Los Ángeles sita en el 3312 de Clerendon Road, en el famoso y lujoso distrito 90210 de Beverly Hills. Allí vive solo y tan sólo sale de vez en cuando a jugar al golf.


Se ha dado a la buena vida: grandes comilonas, piscinita y putas de lujo.


Pero lo preocupante es que hace unos tres meses que ya ni siquiera sale de la mansión. No contesta ni al teléfono a su hermana Sally, que vive en Londres. Siempre dijo que era un gran aficionado a la ufología, y ha montado en los jardines de su mansión grandes equipos de escuchas y telescopios donde dicen que pasa gran parte de la noche intentando tener contacto extraterrestre.

A mediados de 2007 grabó varias canciones en el estudio que tiene en su casa junto a los compositores Chas Jankell y Laura Critchley pero éstos le abandonaron cuando vieron que no se tomaba en serio el trabajo y se dedicaba más a tomar el sol y dormirse al lado de la piscina. Desde entonces, no parece que haya vuelto a trabajar.

Tras diez años de éxitos musicales, fama mundial y ganar decenas de millones, Robbie Williams se encuentra sin discográfica, sin compositores y sin ganas de nada. Un nuevo juguete roto utilizado por la industria para llenarse los bolsillos y luego abandonarlo a su suerte. Sólo tiene 34 años.

2 comentarios:

stonero dijo...

Ya quisiera yo que me usara la industria discografia (o la que fuera) para llenarse los bolsillos si de paso, claro esta, me llena los mios.

Y que despues me abandonen a mi suerte que con la cuenta llena de ceros seguro que no es muy mala.

No tio la verdad es que no me da ninguna pena el Robbie Williams este.


pd.- Tenemos un nuevo colaborador en my biota, eres bien recibido Miguel.

Miguel S. Martín dijo...

No, si a mí tampoco me da ninguna pena, todo lo contrario, con 34 años, millonario y jubilado: es mi ídolo ;-)